22.09.2010, 17:34
Magallanes Moure, Manuel
Chile. 1874 - 1924
El barco viejo
Allá, en aquel paraje solitario del puerto,
se mece el viejo barco a compás de las ondas,
que tejen y destejen sus armiñadas blondas
en derredor del casco roñoso y entreabierto.
De la averiada proa cuelga un cable cubierto
de líquenes que ondulan cuando pasan las rondas
de los peces, clavando sus pupilas redondas
en el barco que flota como un cetáceo muerto.
Y el barco, que fue un barco de los van a Europa,
y que era todo un barco de la proa a la popa,
ahora que está inválido y hecho un sucio pontón,
sus amarras sacude y rechina y se queja
cuando ve que otro barco mar adentro se aleja
mecido por las olas en blanda oscilación.
Chile. 1874 - 1924
El barco viejo
Allá, en aquel paraje solitario del puerto,
se mece el viejo barco a compás de las ondas,
que tejen y destejen sus armiñadas blondas
en derredor del casco roñoso y entreabierto.
De la averiada proa cuelga un cable cubierto
de líquenes que ondulan cuando pasan las rondas
de los peces, clavando sus pupilas redondas
en el barco que flota como un cetáceo muerto.
Y el barco, que fue un barco de los van a Europa,
y que era todo un barco de la proa a la popa,
ahora que está inválido y hecho un sucio pontón,
sus amarras sacude y rechina y se queja
cuando ve que otro barco mar adentro se aleja
mecido por las olas en blanda oscilación.