04.09.2010, 11:39
Dilio
Cuba
A ella
Nació en el seno de tranquilos mares
una virgen de faz encantadora,
la que aparece al despuntar la aurora
entre frondosas ceibas y palmares;
de lirios, azucenas y azahares
primavera gentil su sien decora;
su porvenir inconsolable llora
la linfa del poético Almendares.
Cubren su cielo tenebrosas brumas,
inclina mustia la tan pura frente,
y la sangre del mártir inocente
mancha su lecho virginal de espumas,
por eso triste y abatida vive
a las orillas de la mar caribe.
Cuba
A ella
Nació en el seno de tranquilos mares
una virgen de faz encantadora,
la que aparece al despuntar la aurora
entre frondosas ceibas y palmares;
de lirios, azucenas y azahares
primavera gentil su sien decora;
su porvenir inconsolable llora
la linfa del poético Almendares.
Cubren su cielo tenebrosas brumas,
inclina mustia la tan pura frente,
y la sangre del mártir inocente
mancha su lecho virginal de espumas,
por eso triste y abatida vive
a las orillas de la mar caribe.