30.08.2010, 09:50
A una hermosa
Cuando a la brisa tropical se mece,
no se ve más airosa ni lozana
la palma que los campos engalana,
y al fresco margen del arroyo crece:
Ni con más pompa y esplendor se ofrece
el sol resplandeciente en la mañana,
vistiendo el cielo de arrebol y grana,
que a quien la mira tu beldad parece.
¿A quién no inspira tan sin par belleza
placer y admiración? Sonrisa afable
mora en tus labios, y a adorarte mueve:
Tu pecho infunde celestial terneza:
todo es en ti perfecto y admirable;
Venus misma te dio su planta leve.
Cuando a la brisa tropical se mece,
no se ve más airosa ni lozana
la palma que los campos engalana,
y al fresco margen del arroyo crece:
Ni con más pompa y esplendor se ofrece
el sol resplandeciente en la mañana,
vistiendo el cielo de arrebol y grana,
que a quien la mira tu beldad parece.
¿A quién no inspira tan sin par belleza
placer y admiración? Sonrisa afable
mora en tus labios, y a adorarte mueve:
Tu pecho infunde celestial terneza:
todo es en ti perfecto y admirable;
Venus misma te dio su planta leve.