28.08.2010, 13:37
El pañuelo
Ayer, en la cajita misteriosa
que encierra tus recuerdos adorados,
entre ramos de mirto deshojados,
otra prenda encontré, la más preciosa.
Tu pañuelo, con mano temblorosa
desdoblé, y en los pliegues perfumados
con aromas ya casi evaporados,
desolada oculté la faz llorosa.
¡Cuántas veces con él acariciaste
mi frente, si dormida entre tus brazos,
no despertaba a tus alegres risas!
¡Oh, viento que mi dicha arrebataste!
Como hizo el cruel mi corazón pedazos,
llévaselo en tus alas hecho trizas.
Ayer, en la cajita misteriosa
que encierra tus recuerdos adorados,
entre ramos de mirto deshojados,
otra prenda encontré, la más preciosa.
Tu pañuelo, con mano temblorosa
desdoblé, y en los pliegues perfumados
con aromas ya casi evaporados,
desolada oculté la faz llorosa.
¡Cuántas veces con él acariciaste
mi frente, si dormida entre tus brazos,
no despertaba a tus alegres risas!
¡Oh, viento que mi dicha arrebataste!
Como hizo el cruel mi corazón pedazos,
llévaselo en tus alas hecho trizas.