28.08.2010, 12:18
Jiménez Lamar, Gabriel
Cuba
Decepción
Indómito corcel espoleado
por ansias de pasión y de alegría,
mi corazón cruzaba noche y día,
hacia el país del ideal soñado.
Y ni abrojos del yermo desolado,
ni duros hielos de la estepa fría,
le hicieron desistir en su porfía
de realizar el sueño acariciado.
Mas cuando ya tocaba en su carrera
triunfal, el paraíso de ventura,
donde todo es amor y primavera,
retrocedió temblando de pavura;
que al entrada al jardín de la Quimera,
cerraban el dolor y la locura.
Cuba
Decepción
Indómito corcel espoleado
por ansias de pasión y de alegría,
mi corazón cruzaba noche y día,
hacia el país del ideal soñado.
Y ni abrojos del yermo desolado,
ni duros hielos de la estepa fría,
le hicieron desistir en su porfía
de realizar el sueño acariciado.
Mas cuando ya tocaba en su carrera
triunfal, el paraíso de ventura,
donde todo es amor y primavera,
retrocedió temblando de pavura;
que al entrada al jardín de la Quimera,
cerraban el dolor y la locura.