21.08.2010, 13:47
Conato de venganza a una mujer
Quisiera...pero no; por más que impía
provoques mi furor, puedes calmarte;
te ensalzará de fijo al calumniante,
y al decir la verdad me humillaría.
Ya que no conseguí con ser tan mía
hicieses de mi fe punto y aparte,
jamás, ni en lengua, volveré a tomarte,
que siempre algo de ti me quedaría.
Y piensa que a mi voz, ¡cuántos desvelos!
en tu pecho do anidan las traiciones,
luto sembrar pudiera y llanto y celos;
mas ¿quién a tu cariño abre prisiones?
la dicha que cayó desde los cielos
no se debe buscar por los rincones.
Quisiera...pero no; por más que impía
provoques mi furor, puedes calmarte;
te ensalzará de fijo al calumniante,
y al decir la verdad me humillaría.
Ya que no conseguí con ser tan mía
hicieses de mi fe punto y aparte,
jamás, ni en lengua, volveré a tomarte,
que siempre algo de ti me quedaría.
Y piensa que a mi voz, ¡cuántos desvelos!
en tu pecho do anidan las traiciones,
luto sembrar pudiera y llanto y celos;
mas ¿quién a tu cariño abre prisiones?
la dicha que cayó desde los cielos
no se debe buscar por los rincones.