20.08.2010, 16:41
Al rico trueca en pobre la avaricia
y la lujuria al torpe desenfrena,
la gula a eterno malestar condena
y la ambición a perennal codicia.
La envidia la mejor natura vicia;
el orgullo no tiene hora serena,
y la gloria es no más, sueño que apena
al vate que gozoso la acaricia.
Entre tantas pasiones sólo hay una
que da al mortal la dicha apetecida;
por ella el hombre el oro, la fortuna,
la gloria, la ambición, todo lo olvida:
es el Amor de nuestros goces cuna;
es el Amor, ¡bien único en la vida!
y la lujuria al torpe desenfrena,
la gula a eterno malestar condena
y la ambición a perennal codicia.
La envidia la mejor natura vicia;
el orgullo no tiene hora serena,
y la gloria es no más, sueño que apena
al vate que gozoso la acaricia.
Entre tantas pasiones sólo hay una
que da al mortal la dicha apetecida;
por ella el hombre el oro, la fortuna,
la gloria, la ambición, todo lo olvida:
es el Amor de nuestros goces cuna;
es el Amor, ¡bien único en la vida!