25.09.2010, 10:08
Sarthou Carreres, Vicente
Spanien
Se ha truncado mi vida
No ambiciono, mi bien, laurel ni oro;
ni deseo placeres ni alegría;
la desgracia me hirió y el alma mía
en ti cifra su dicha y su tesoro.
Paz ansío; y en premio a que te adoro,
que seas en mi senda, amparo y guía,
tú, que por mí lloraste un día,
hoy verás que por ti suspiro y lloro.
Se ha truncado mi vida, pero el dardo
que me hirió ha desterrado la pasión;
hoy me siento feliz porque soy fuerte,
y lleno de ansiedad y de fe aguardo
ofrendarte un valiente corazón
que no teme a la vida ni a la muerte.
Spanien
Se ha truncado mi vida
No ambiciono, mi bien, laurel ni oro;
ni deseo placeres ni alegría;
la desgracia me hirió y el alma mía
en ti cifra su dicha y su tesoro.
Paz ansío; y en premio a que te adoro,
que seas en mi senda, amparo y guía,
tú, que por mí lloraste un día,
hoy verás que por ti suspiro y lloro.
Se ha truncado mi vida, pero el dardo
que me hirió ha desterrado la pasión;
hoy me siento feliz porque soy fuerte,
y lleno de ansiedad y de fe aguardo
ofrendarte un valiente corazón
que no teme a la vida ni a la muerte.