12.09.2010, 15:30
Su toga
Adiós, por siempre, toga idolatrada;
adiós, por siempre, ensueño de mi vida;
te he vestido con alma enamorada,
y hoy te dejo con alma entristecida.
A mis hijos te lego inmaculada,
ya que no, cual quisiera, enaltecida...
Así dijo, Señor, la voz honrada
de mi padre en amarga despedida.
El que a tantos juzgó, por Ti juzgado,
digno de Ti será: ¡padre querido,
de honor espejo, de virtud dechado!...
Dale, Señor, el premio merecido...
Y haz de tu noble toga, que he heredado,
el más alto blasón de mi apellido.
Adiós, por siempre, toga idolatrada;
adiós, por siempre, ensueño de mi vida;
te he vestido con alma enamorada,
y hoy te dejo con alma entristecida.
A mis hijos te lego inmaculada,
ya que no, cual quisiera, enaltecida...
Así dijo, Señor, la voz honrada
de mi padre en amarga despedida.
El que a tantos juzgó, por Ti juzgado,
digno de Ti será: ¡padre querido,
de honor espejo, de virtud dechado!...
Dale, Señor, el premio merecido...
Y haz de tu noble toga, que he heredado,
el más alto blasón de mi apellido.