22.08.2010, 10:00
Al mismo asunto
¿Por qué tristes, gemís, y en desconsuelo
amargo al corazón brota los ojos
ardiente llanto de dolor y enojos,
vestida el alma en funerario velo?
¿Impía querella enderezáis al cielo?
¿La escala de Jacob cubrís de abrojos
y ante míseros restos y despojos
por ella a Dios no levantáis el vuelo?
¡Oh ciegos, que no veis como en profundo
gozo bañada el ánima del vate
sube, y radiante, a la mansión de gloria!
Su patria es ella; su prisión el mundo:
aquí, en la vida, desigual combate;
allí, en la muerte, sin igual victoria.
¿Por qué tristes, gemís, y en desconsuelo
amargo al corazón brota los ojos
ardiente llanto de dolor y enojos,
vestida el alma en funerario velo?
¿Impía querella enderezáis al cielo?
¿La escala de Jacob cubrís de abrojos
y ante míseros restos y despojos
por ella a Dios no levantáis el vuelo?
¡Oh ciegos, que no veis como en profundo
gozo bañada el ánima del vate
sube, y radiante, a la mansión de gloria!
Su patria es ella; su prisión el mundo:
aquí, en la vida, desigual combate;
allí, en la muerte, sin igual victoria.